Por qué ser cuentacuentos en tu clase.

¡Hola! Primer post de la sección Cuentos y Literatura.

Hoy te presento un artículo muy lindo e inspirador. El autor, Matthew Friday, es Docente y Coordinador de Literatura en una Escuela Internacional en China. Tiene una vasta experiencia, en la que incluye haber dado clase en Inglaterra, Alemania y, ahora, Asia; además de ser un escritor publicado y un narrador de cuentos profesional.

En este artículo nos explica de qué se trata contar cuentos y lo valioso que puede ser en nuestras clases. 

Te invito a leerlo!

¿Qué es ser cuentacuentos? Contar cuentos, claro! Hoy hay tantas formas de hacerlo, diversas, maravillosas y a veces abrumadoras. Pero exploremos la narración de cuentos tradicional, oral, que ha sido parte de la vida humana desde que nuestros ancestros salieron de África hace unos 200.000 años o más. Tal vez contar cuentos o historias es la razón por la que se desarrolló el lenguaje en primer lugar, cuando nuestras mentes comenzaron a indagar, cuestionar, pensar.

¿Por qué contamos cuentos?

Sea en cuevas o en ciudades, contar historias sigue siendo la forma de comunicación más innata e importante. Cómo fue nuestro día, la historia de nuestra vida, chismes del trabajo, los horrores de las noticias... Nuestros cerebros están cableados para pensar y expresarse en términos de introducción, nudo y desenlace. Es como entendemos el mundo.

Contar historias es la forma más antigua de enseñar. Así se conectaron las primeras comunidades humanas, dando a los niños las respuestas a las grandes preguntas sobre la creación, la vida y la muerte. Las historias nos definen, nos moldean, nos controlan y nos crean. No todas las culturas del mundo son literarias, pero todas las culturas cuentan historias.

Las historias nos acompañan desde siempre
(Fuente foto: Pinterest)

¿Podés ser cuentacuentos y maestr@?

¡Ya lo sos! Los maestros son cuentacuentos, y los cuentacuentos han sido maestros por milenios. En realidad, los maestros no se ven como cuentacuentos. O sino, ven a los cuentacuentos y piensan que se trata de una forma exagerada y teatral de actuación. Pero esperá un minuto -ser maestros definitivamente tiene algo de teatral y de actuación.

Ser un cuentacuentos interactivo.

Es importante que les describa mi "estilo" personal. No me apoyo solamente en "hablar" la historia, no me siento en una silla sin moverme. Hablo pausado, pero alternando el ritmo. Camino, uso mucho mis manos. Y, lo más importante, invito a los chicos a actuar la historia mientras la cuento. Se disfrazan con sombreros divertidos y otros accesorios, siguen las instrucciones de la historia y repiten los diálogos que relato. Me detengo y comienzo la historia varias veces, pidiéndoles que contribuyan con "efectos de sonido", que respondan preguntas, que hagan sugerencias.

Los beneficios de contar historias.

Cuando contás una historia por primera vez, hay un momento mágico... Los chicos se sientan absortos, boquiabiertos y mirando con atención. Si eso no es razón suficiente, entonces considerá que contar historias:

• Inspira conversaciones, y no sólo sobre el cuento -hay muchos juegos y actividades para hacer.
• Fomenta el entusiasmo por leer textos para encontrar historias, releerlas, etc.
• Inicia en la escritura, porque los chicos querrán escribir historias y contarlas.
• Mejora la escucha.
• Realmente "atrapa" a los chicos que disfrutan de actuar.
• Entretiene a chicos de todas las edades.
• Motiva, al aprender inglés, a hablar y escribir en este idioma. (*)

El último punto quedó realmente demostrado este año. En mi escuela el 97% de los chicos no son angloparlantes nativos, en mi clase muchos llegan hablando poco o nada de inglés. El factor más influyente en su progreso con el inglés es el querer contar historias.

(*) Nota: El autor da clases en una escuela internacional en China, pero este punto es igualmente importante para profes de inglés u otros idiomas.

Entonces, ¿cómo ser cuentacuentos?
Yo recomiendo lo siguiente:

1. Leé tantas fábulas, mitos, leyendas e historias del mundo como puedas.
2. Observá a cuentacuentos profesionales y tomá nota de cómo lo hacen. Cada uno es diferente, y podés aprender algo de todos.
3. Trabajá tu confianza y seguridad leyéndole a tus alumnos, en voz alta, libros con imágenes o en capítulos. Hacé pausas para preguntas, hacé que la lectura sea interactiva. Te ayudará a crear un evento compartido con la historia.
4. Elegí historias con pocos personajes y hechos repetitivos, ya que son más fáciles de recordar. Dicho esto, elegí cualquier historia que te guste -no, que te encante! Si te cautiva a vos, seguro cautivará a los más pequeños también.
5. Escribí las historias en un cuaderno. Escribirlas ayuda a recordarlas, lo mismo con los chicos.
6. Cuando comiences a contar tu historia, está bien tener el libro a mano y echarle un vistazo si te perdés. No seas tan autoexigente, estás aprendiendo de nuevo.
7. Conseguite una "caja de disfraces" y llenala con sombreros y objetos que los chicos puedan usar creativamente. Yo obtengo muchos materiales reciclando.

(Fuente foto: Pinterest)

Y ahora, ¿qué sigue?

Convertirte en cuentacuentos lleva esfuerzo y dedicación de tu parte, claro, pero con tantos beneficios, ¿no vale la pena? Podrías sorprenderte a vos mismo, y seguramente sorprenderás a tus alumnas. En relativamente poco tiempo, podrías estar contando historias, armando grupos de narración, capturando la atención de toda la asamblea escolar, colaborando con eventos escolares y programas de capacitación. Yo nunca pensé que haría nada de eso cuando comencé a estudiar, hace siete años.

¿Qué te detiene? La próxima historia nace en vos...

[Artículo publicado por Edutopia, traducido por Lápiz, Papel y Tijera. Para acceder al artículo original, hacé click aquí]

Yo ya tengo ganas de ponerme a leer cuentos, ¿y vos?

¿Cuál es tu historia favorita para contarle a los chicos?